El sector de las reformas y la rehabilitación perderá tracción durante este año. Este segmento de la construcción sufrió una caída del 1,4%, durante 2022, y se estima que vuelva a retroceder un 2,9%, en 2023; según el último informe presentado por la Asociación Nacional de Distribuidores de Cerámica y Materiales de Construcción (Andimac). «La caída de actividad en reforma está relacionada fundamentalmente con dos motivos: la crisis energética y su repercusión sobre los precios y el poder adquisitivo, y el efecto base que representó un ejercicio 2021 muy expansivo para el segmento de la reforma», explican desde la Asociación.

La actividad del mercado de materiales para edificación estuvo muy impulsada por la obra nueva, que registró un aumento del 12,75% durante el pasado año, aunque se quedará plana en 2023. El segundo catalizador ha sido la reforma de viviendas de segunda mano. Sin embargo, este segmento será el que más impulso perderá durante este año. «La reforma de inmuebles de segunda mano podría caer un 15%», explicaron los portavoces durante la presentación del informe. Por consecuencia, las obras en las viviendas se centrarán a partir de ahora en mejorar la calidad de la residencia habitual.

Durante 2022, el gasto medio de la reforma de la vivienda fue de 1.082 euros, un 4,6% superior al del año anterior. El número total de inmuebles que tuvieron obras de mejora se redujo un 1,4%, hasta los 1,75 millones de unidades. 

La patronal de los materiales de construcción ha confirmado que el coste de los materiales creció alrededor de un 9%, durante el pasado año, debido a las «tensiones inflacionarias». Para este año estiman que este rápido aumento se modere y se cierre el año con crecimientos del 1,2%, situándose «en torno a la media de la inflación prevista».

Fuente: epe